Era marzo del 2020 cuando el Ministerio de Educación de Perú anunció la suspensión las clases presenciales, todos (docentes, alumnos y padres de familias) estábamos con mucha incertidumbre por lo que se venía o qué pasaría en el sector educación. El 06 de abril se oficializaron las clases a distancia, fue un vuelco de 180° para todos, salimos de manera forzada de la zona de confort, no tuvimos tiempo de una preparación para ello, fue difícil adaptarse por diversas razones, dos de ellas fueron: la primera que no estaríamos juntos con nuestros estudiantes, muchos en diversos departamentos, algunos sin acceso a internet, etc. y la segunda el uso de las tecnologías para la enseñanza, fue un gran obstáculo para muchos adaptarnos a esta nueva forma de enseñanza, a reaprender, a buscar nuevas estrategias, a buscar soluciones a la diversidad de situaciones que se presentaban en esta coyuntura. ¡Pero no! no nos rendimos. A pesar de diversas dificultades supimos no parar, no quedarnos y segu...